Generalidades del proceso creativo

La creatividad en la psicología

Como novelista y poeta que también entrena la inteligencia creativa, veo a muchas personas y organizaciones cuyos grandes sueños no se hacen realidad, normalmente por culpa de la procrastinación, la confusión, el agobio o el autosabotaje.
Durante dos años, esta respetada periodista, que cumplía con exigentes plazos de entrega casi a diario, se había estado fallando a sí misma. Tenía una historia que quería contar, había demostrado su capacidad y deseaba escribir esta novela por encima de todo. Entonces, ¿por qué su sueño se convertía siempre en polvo?
Jenna no está sola. Según los investigadores de mercado Opinion Research Corp., el 92% de nosotros arrastramos aspiraciones que no hemos podido cumplir, la mayoría relacionadas con el dinero (34%) el cuerpo y la salud (38%); las relaciones (31%) y la categoría más alta, la superación personal (47%).
Por el contrario, la escuela y la sociedad han suprimido, por diversas razones, nuestra inteligencia creativa en favor de habilidades más prácticas y analíticas. Entender cómo funciona el proceso creativo es el primer paso para liberarnos del bloqueo y la resistencia que provoca esta supresión.

Definición de creatividad

Siempre he pensado que aprender cómo funciona tu cerebro es una de las mejores maneras de superar cualquier resistencia o miedo a escribir, ya que este conocimiento te permitirá sacar el máximo partido a tu creatividad. Por eso quiero hablarte del proceso creativo (también conocido como la búsqueda de una idea o solución a un problema) que es una batalla interna que todos tenemos que librar antes de empezar a escribir.    Todo proceso creativo pasa por cuatro etapas: preparación, incubación, iluminación y verificación.
1. PreparaciónEsta primera etapa puede variar ligeramente en función de si sabes o no sobre qué quieres escribir. Veamos un ejemplo. Supongamos que no está seguro de los detalles de su historia, pero ha decidido que quiere escribir una novela bélica. En este caso, puedes empezar con el proceso de documentación. No será una investigación exhaustiva (eso vendrá después), ya que sabes muy poco sobre tu historia, pero puedes hojear libros y revistas relacionados con el tema principal, ver películas y documentales, ir a exposiciones y entrevistar a personas. No hay mejor punto de partida.    Ahora bien, suponiendo que no sepas sobre qué quieres escribir, el método más eficaz para encontrar una buena idea es hacer una búsqueda libre de información en la que leas, veas, escuches y aprendas sobre cualquier cosa que te interese. Durante esta fase del proceso creativo, tu mente es similar a una coctelera vacía que puedes llenar con muchos ingredientes diferentes.

Definiciones de creatividad

El arte suele considerarse un dominio arquetípico de la investigación sobre la creatividad (Schlewitt-Haynes et al., 2002; Stanko-Kaczmarek, 2012), complementado por la investigación sobre la creatividad científica, musical, orientada al diseño y literaria (Glaveanu et al., 2013). Aunque se puede observar cierto solapamiento entre los distintos campos creativos, cada uno de ellos tiene sus propias especificidades (Botella y Lubart, 2015). El propósito de esta sección es fusionar algunos modelos existentes del proceso creativo y del proceso artístico para examinar lo que podría ser el proceso creativo artístico. Obviamente, esta sección no puede ser exhaustiva, pero ofrece una primera consideración de las numerosas e importantes etapas del proceso creativo artístico.
Antes de la segunda etapa principal descrita por Wallas (1926), algunos autores añadieron etapas complementarias después de la preparación. Basándose en una revisión previa de la literatura, Botella et al. (2011) proponen una etapa de concentración («me estoy concentrando en el trabajo que tengo que hacer») en la que es posible centrar la atención del creador en aquellas soluciones que se consideran adecuadas, y rechazar las demás soluciones (Carson, 1999). Osborn (1953/1963) añadió el análisis, cuando el creador da un paso atrás para identificar las relaciones entre las ideas y la importancia de cada una de ellas; y la ideación, cuando el individuo desarrolla ideas alternativas. Busse y Mansfield (1980) indicaron también una etapa que requiere un esfuerzo para resolver el problema.

Proceso de creatividad

La sección principal de este artículo puede ser demasiado corta para resumir adecuadamente los puntos clave. Por favor, considere la posibilidad de ampliar el lead para proporcionar una visión general accesible de todos los aspectos importantes del artículo. (Diciembre de 2019)
La creatividad es un fenómeno por el que se forma algo de algún modo nuevo y de alguna manera valioso. El elemento creado puede ser intangible (como una idea, una teoría científica, una composición musical o un chiste) o un objeto físico (como un invento, una obra literaria impresa o un cuadro).
La palabra inglesa creativity procede del término latino creare, «crear, hacer»: sus sufijos derivativos también proceden del latín. La palabra «create» apareció en inglés ya en el siglo XIV, sobre todo en Chaucer (en The Parson’s Tale[1]), para indicar la creación divina[2].
La creatividad en general suele distinguirse de la innovación en particular, donde se hace hincapié en la aplicación. Por ejemplo, Teresa Amabile y Pratt (2016) definen la creatividad como la producción de ideas novedosas y útiles y la innovación como la puesta en práctica de las ideas creativas,[7] mientras que la OCDE y Eurostat afirman que «la innovación es más que una idea nueva o una invención. Una innovación requiere su puesta en práctica, ya sea poniéndola en uso activo o poniéndola a disposición de otras partes, empresas, individuos u organizaciones»[8].